Al principio, afirmaba Boisent, el enamoramiento tiene numerosas
similitudes con procesos gripales: estado febril, dilatación de pupilas, palpitaciones,
sudoración, temperatura alta y disminución de pensamiento periférico.
El mal de amores cursa los primeros días como un catarro, pero a
lo bestia, hasta que el paciente se habitúa a la presencia de la persona amada.
Después, los síntomas en vez de remitir como sucede en los
procesos gripales, se multiplican, el enamorado pierde el apetito, pasa las
noches en vela con gran ansiedad y se entrega al aislamiento y la soledad.
Y aunque el paciente sabe lo que le está pasando no hay antibiótico
ni antigripal que le alivie, la vida sin la persona amada se convierte entonces
en un infierno.
En función del organismo afectado, su periodo de recuperación
puede ser de unos días o convertirse en una enfermedad crónica.
Un desasosiego
para toda la vida...
entonces si que he estado muchas veces enamorada! xD
ResponderEliminarQ chica tan enamoradiza ;) xDD LOL
ResponderEliminar(K)
he hecho un lavado de cara a mi blog! haber si te gusta!
ResponderEliminarhttp://eldiariodesophia-sophia.blogspot.com/
y 2 nuevas entradas! =)
Muy lindo TODO :)
ResponderEliminarEnhorabuena ;)
(K)